Ellos dieron su vida para salvar a los demás. Gracias a su dedicación y su valentía, decenas, cientos y miles de personas pudieron salvar sus vidas. Ni las guerras, ni los desastres naturales, ni el terrorismo puede detenerlos. En África, en Medio Oriente, en América Latina y en otros lugares del mundo, ellos no sólo invierten su tiempo, sus recursos y su seguridad, sino también lo más valioso; que son sus vidas, para hacer de este mundo, un mejor lugar para vivir. 
 

Su santidad el 14to Dalai Lama, Tenzin Gyatso, es el líder espiritual del Tíbet. Ha recibido más de 150 premios, doctorados honorarios y premios en reconocimiento de su mensaje de paz, responsabilidad universal y compasión.

Estas personas viven entre nosotros. Son los héroes de hoy.