El segundo panel de los Diálogos Aurora 2016 mostró a algunos de los principales activistas humanitarios comprometidos con la creación de políticas gubernamentales e institucionales que afectan las vidas de millones de refugiados. El panel fue abierto por Vigen Sargsyan, a cargo de la Administración Presidencial de la República de Armenia. Sargsyan recordó la conmemoración del centenario del Genocidio Armenio, que ocurrió el año pasado, y enfatizó el hecho de que “no es solamente el derecho de Armenia, sino también la obligación de Armenia el organizar foros acerca del crimen de Genocidio”.
Siguiendo a Sargsyan, Gareth Evans, ex ministro de relaciones exteriores de Australia, presidente emérito del International Crisis Group y miembro del Comité de Selección del Premio Aurora, tomó la palabra. Evans realizó una presentación de apertura, con el énfasis en las falencias de la respuesta internacional a la crisis mundial de los refugiados. Sin embargo, comentó que “hay dos cosas que pueden hacerse: una de ellas es tratar de resolver el problema en el lugar de origen, al quitar el miedo que sienten las personas (en sus hogares) y tratar con humanidad, decencia y dignidad a los que han huido”.
Gareth Evans, ex ministro de relaciones exteriores de Australia |
El panel estuvo moderado por Gillian Sorensen, miembro del directorio del International Rescue Committee y asesora principal de la Fundación de las Naciones Unidas. Habiendo nacido en los Estados Unidos, ella remarcó que todos los norteamericanos “fueron en algún punto refugiados”. Sorensen luego presentó a Enrique Eguren, presidente del directorio de Protection International, una organización que tiene como objetivo proteger a los trabajadores por los derechos humanos. Cuando se le preguntó sobre la crisis de los refugiados, Eguren fue lúcido y preciso: “Tenemos un problema complejo y tenemos que arribar a una solución compleja”.
La moderadora de la sesión, Gillian Sorensen y el panelista Gareth Evans |
El siguiente orador fue el presidente emérito de la Open Society Foundation, Aryeh Neier, quien también fue refugiado. Realizó una crítica de la respuesta de algunos de los países europeos a la crisis de los refugiados y los llamó “deshonrosos”. Sin embargo, Neier destacó a la canciller alemana Angela Merkel, y resaltó que a ella "se le debería rendir homenaje por haber desempeñado ese tipo de papel [como líder en la recepción de refugiados]”.
Durante la sesión de preguntas y respuestas, un periodista turco de Bianet consultó acerca de las negociaciones en curso entre la Unión Europea y Turquía relativa a la crisis de refugiados sirios. En su respuesta franca, Evans apuntó que el acuerdo “no fue la más feliz de las soluciones”, al tiempo que agregó, “tiene, de hecho, el potencial de impedir que la gente se aventure en esos viajes peligrosos. No es para puristas, pero al menos fue algo para aliviar el problema que estamos atravesando”, dijo.
Otra pregunta que fue hecha, esta vez de la mano de una abogada de Irán, puso un elemento visceralmente humano en la discusión. Recordó la historia de un niño de 16 años que se ahorcó en un campo de refugiados en Alemania y preguntó si Europa es un lugar seguro para los refugiados cuando arriban. En respuesta, Neier dijo que cree que “es necesario tratar de llamar la atención hacia historias de este tipo para dramatizar el costo humano de algunas de las políticas implementadas en la actualidad”.
Aryeh Neier, Enrique Eguren y Gillian Sorensen |
Neier continuó haciendo especial hincapié en el liderazgo político: “Una de las cosas que se puede decir es que el liderazgo político es muy importante. Cuando un país actúa con un espíritu falto de generosidad, los líderes políticos de ese país están explotando los miedos de los ciudadanos de ese país. Cuando un país actúa con generosidad, se debe a que los líderes desean tomar riesgos políticos. Necesitamos resaltar que hay un liderazgo que asume un rol instructivo y un liderazgo que asume un rol destructivo”.
Gareth Evans dio el mensaje más conmovedor del panel, que resumió su espíritu: “Estimular la presión de abajo hacia arriba debería ser la tarea de defensa de todos nosotros”.