Haifa Dia Al-Attia: “Necesitamos intensificar nuestros esfuerzos”

Haifa Dia Al-Attia: “Necesitamos intensificar nuestros esfuerzos”

Haifa Dia Al-Attia, CEO de la Fundación Reina Rania, habló con nosotros sobre el poder transformador que tiene la educación, la responsabilidad compartida de la sociedad y la importancia de los modelos positivos a seguir. 

¿Cuál le parece que es la cuestión humanitaria más apremiante?

Es muy difícil decirlo, pero creo que las personas desplazadas se encuentran en lo más alto de la lista. Solamente en 2016 hubo 120 conflictos activos y 82 desastres naturales que expulsaron a 65 millones de personas de sus hogares. 21 millones dejaron sus países y se convirtieron en refugiados. Además, 40 millones de personas fueron desplazadas internamente. Esta es una crisis en todos los niveles porque no se trata, simplemente, de buscar refugio, sentirse a salvo, tener acceso a la alimentación o a la salud, se trata, también, de tener acceso a la educación. Se trata de tener acceso a una vida normal y a la esperanza.

¿Quién cree que podría resolver estos problemas?

Creo que la responsable es nuestra humanidad compartida, me parece que todos necesitamos intensificar nuestros esfuerzos. En muchos casos, hay gobiernos que toman grandes medidas. En particular, si se observa la crisis de los refugiados, se puede ver que los países anfitriones son, principalmente, países de bajos ingresos o de ingresos medios como Jordania; en este sentido, ahí hay gobiernos que se esfuerzan, empresas que se esfuerzan y ONGs que trabajan duro. Creo que se trata más bien de asegurarnos de que cada uno de nosotros también se de cuenta de que todos somos responsables de lo que sucede con las demás personas en este mundo. O prosperamos juntos o desaparecemos juntos.

¿Cuál es el rol de la educación en todo esto?

En cierto sentido, la educación equivale a la esperanza. Si alguien se siente a salvo y fortalecido, sabe que su vida no está fuera de control. Hay que pensar en cuáles son las herramientas que alguien necesita para poder avanzar. Si no tiene educación, tiene muy poco con que seguir adelante. Es diferente para cada uno porque las personas que necesitan educación no provienen del mismo lugar. Algunos sólo necesitan ponerse al día, otros nunca comenzaron sus estudios o nunca tuvieron la oportunidad y otros, están luchando por ello. Pero el problema principal, por supuesto, es el acceso a una educación de calidad. Actualmente, existen tecnologías que permiten que todo tipo de ayuda esté disponible a través de muchas asociaciones.

¿Qué importancia tiene el Premio Aurora y cuál es su rol?

Hay muchas formas diferentes en las que se puede generar un impacto en esta área, en este espacio y una de ellas es, simplemente, la generación de conciencia. Creo que sin el Premio Aurora no sería visible parte del gran trabajo que se realiza. Ustedes inspiran a la gente. Gracias a ustedes, cada persona que recibe este premio e, incluso, cada persona que presenta una nominación para el premio, piensa en lo que está haciendo. No sólo en el trabajo de los candidatos, sino el de ellos mismos; qué es lo que ellos hacen para ayudar. El Premio Aurora hace que todos piensen en que “todas las personas pueden marcar la diferencia”. El resultado es que la gente comienza a creer que cada uno puede marcar la diferencia si se lo propone. Creo que es una iniciativa increíble.

¿Hay alguien a quien le gustaría nominar para el próximo Premio Aurora?

No puedo decirlo ahora mismo, pero sí puedo decir una cosa. Hay muchísima gente a la que se le debería dar este tipo de reconocimiento, pero también hay muchos otros que siguen sus pasos. Y creo que eso es lo que debería servir de inspiración para todas las personas que hacen un trabajo de bien.